Si bien es cierto que la mayor parte del tiempo permanecemos conectados a redes WiFi privadas, como pueden ser la de casa y la de la oficina, en otras instancias nos veremos obligados, o nosotros mismos estaremos de acuerdo, a conectarnos en redes públicas, que no sabemos quiénes manejan ni qué clase de seguridad tienen tras de estas conexiones.
Justamente por ese motivo es que, en las siguientes líneas, queremos darte algunos trucos para navegar seguro en una red WiFi pública, trucos que podrían serte de ayuda a la hora de evitar algunos de los principales peligros que aparecen cuando tenemos ese hábito.
¿Y cuáles son esos riesgos? Pues bien, entre algunos de los más importantes podemos mencionar, por ejemplo, la ausencia de una encriptación fiable y, a partir de ello, la posibilidad de sufrir ataques de terceros, como el snooping o el sniffing.
Con lo anterior en mente, y la certeza de que los ataques en zonas WiFi públicas son más frecuentes de lo que uno imaginaría, es el momento entonces de elaborar una estrategia para cuidar nuestros contenidos, a partir de varios consejos útiles, como los siguientes:
Las redes privadas virtuales, también conocidas como VPN, son una solución cada vez más habitual, que básicamente engañan a los sitios a los que nos conectamos, haciéndoles creer que nos encontramos en un lugar, cuando en realidad estamos en otro.
Esto hace que puedas acceder a contenidos restringidos en tu país pero, sobre todo, que dispongas de tus datos personales encriptados, para que nadie pueda robártelos.
Los antivirus son esenciales para cualquier sistema de defensa que hayas planeado para tus dispositivos, y en este sentido debemos decir que muchos gratuitos ya son lo suficientemente buenos como para protegerte de los ataques externos.
Hay distintos softwares de este tipo, algunos de ellos más orientados a los virus tradicionales, y otros a las formas de troyanos, spyware y similares más actuales.
Si quedar en una situación de vulnerabilidad sabiendo de ello es grave, mucho peor es permanecer en esa situación sin siquiera tener idea de ello, que es precisamente lo que ocurre cuando nuestro ordenador se conecta automáticamente a redes WiFi, sin que siquiera se lo hayamos pedido, arriesgándolo todo en el camino.
Tienes que modificar las preferencias de tu sistema operativo para que eso no suceda.
Si tienes o quieres realizar movimientos bancarios o compras desde Internet, procedimientos en los que usualmente debes agregar datos sensibles, intenta hacerlo siempre pero siempre desde tus redes hogareñas, ya que cualquier otra cosa podría provocarte un dolor de cabeza de proporciones que ni imaginas.
Aunque mucho más rudimentario que todo lo que hemos señalado antes, en los espacios públicos puede que nos confiemos y perdamos nuestros equipos de vista por un rato, así que recuerda estar siempre atento a ellos para evitar que alguien más los manipule.