Granada es uno de esos tantos destinos ideales que tiene España para pasar todo un fin de semana. Dentro de la ciudad vamos a encontrar una enorme cantidad de paseos que podemos realizar en apenas un par de días, y que nos dejarán con el deseo de visitarla de vuelta para conocer más.
Lo interesante del caso es que la mayor parte de los atractivos que tiene esta localidad permanecen abiertos al público durante el sábado y el domingo, aunque como siempre hay alguna excepción, conviene que te fijes en armar un itinerario perfecto, en el que todas estas salidas tengan lugar.
Por ejemplo, el sábado por la mañana no hay mejor propuesta que recorrer la fábrica de Ron Montero en Motril, siendo uno de los mayores orgullos locales, y además una experiencia que seguramente fascinará incluso a quienes no sean amantes de esta bebida, por todo el detalle que lleva el proceso que permite su producción, y por la magia única que se respira en el sitio.
Es clave tener en cuenta que se te solicitará una reserva previa para acceder a la tradicional bodega Ron Montero. Realizan completas caminatas guiadas, con degustaciones y explicaciones diversas.
Ya de vuelta en la ciudad, no puedes perderte de ninguna manera La Alhambra, así que toma la misma mochila o bolso que te acompañó hasta Motril, para descubrir esta increíble ciudadela.
La corte del reino Nazarí de Granada es sólo uno de los puntos donde debes detenerte, que son más de los que uno imaginaría si consideramos además el Generalife, el Palacio de Carlos V, la Alcazaba y los Palacios Nazaríes. Tampoco debería faltar en tu rutina, evidentemente, el Patio de los Leones.
Otra vez, tendrás que avisar de tu visita, asegurándote la entrada.
Declarado Patrimonio de la Humanidad en 1984 y conocido como “el auténtico barrio de Granada”, llama la atención inmediatamente por sus calles estrechas, sinuosas, que se pierden unas en otras. Además las casas blancas le dan un toque muy particular, y toda La Carrera del Darro, la que le separa de La Alhambra, es una belleza que no puedes dejar de poner ante tus ojos.
En la mañana del domingo deberías acercarte a la Catedral de Granada y los Sepulcros Reales, templo majestuoso si los hay en territorio español, el cual fuera levantado como un homenaje a Santa María de la Encarnación. Sobresalen también los sepulcros de los Reyes Católicos, Juana la Loca y Felipe el Hermoso, que completan el nombre de este imperdible conjunto.
El barrio desarrollado a los pies de La Alhambra, el antiguo barrio judío de Granada, es uno de esos que parecen de cuentos de hadas. Más relajado que El Albaicín, las callejuelas que nacen y mueren en la plaza principal y las manifestaciones de arte urbano son perfectas para fotografías y vídeos.
Por último, si quieres disfrutar de un atardecer en Granada, y de uno de los más bonitos que tiene para brindarte esta localidad, debes dirigirte hasta el Mirador de San Nicolás, donde se congregan turistas y ciudadanos locales por igual, varios de ellos bailando mientras la guitarra marca el paso.