La gastronomía gallega es una de esas que, dentro de España, podría decirse que posee personalidad propia. Después de todo, muchos de sus platos típicos no son comunes en el resto del territorio nacional, o sólo pueden apreciarse en su punto máximo de sabor y frescura en esta parte del país.
A raíz de ello, y aprovechando la oportunidad de visitar Galicia que poco a poco vuelve a producirse con las menores restricciones por la pandemia, es que en el presente artículo, queremos recomendarte 5 comidas y bebidas gallegas que no deberías perderte una vez en tu destino.
Antes de comenzar, y como suele suceder casi siempre, no podemos perder de vista que la ubicación geográfica es un factor determinante a la hora de comprender cómo se desarrolla una cultura culinaria. En este caso en particular, el mar tiene una preponderancia absoluta, algo que quedará patente a continuación, aunque también destacan otras preparaciones ajenas al mismo.
Probablemente el pulpo a la gallega es el símbolo más trascendente de la gastronomía local, además de una muestra de lo que decíamos previamente, respecto a la relevancia del mar y sus alimentos.
La mayoría coincide en que debe elaborarse con abundante laurel, aceite y pimentón, que debe servirse en un plato de madera y con palillos que permitan, cómodamente, mojar el pulpo y el pan en aceite. Como tantas comidas, podríamos afirmar que se acompaña de un ritual que la excede.
Y si el pulpo a la gallega nos exige dedicarle una buena parte del día para estar tranquilos y participar de ese encuentro familiar o con amigos, la empanada gallega es la mejor representación de las comidas rápidas de la zona, que facilitan su consumo sin olvidarse del gusto, lo principal.
Incluso, aunque se las consigue también fuera de Galicia, un verdadero gallego te dirá que esas que compras en Madrid y Barcelona no son empanadas como las que hace su madre o abuela.
El hecho de imaginarnos un platillo que lleve tocino, chorizo, carne de cerdo y de red, hortalizas, garbanzos, repollo y otros exquisitos ingredientes, ya nos da ganas de sentarnos a la mesa.
Con el cocido gallego ocurre exactamente eso, y si las bajas temperaturas o el viento de la costa te sorprenden, no encontrarás un mejor aliado para sumar calorías y mantenerte caliente.
También ideal para elinvierno, el caldo gallego repite la carne de cerdo, el chorizo y el repollo, admitiendo luego tantas variedades como familias de la región lo disfrutan en sus hogares.
No podíamos terminar este listado sin centrarnos en alguna bebida gallera, y para no dejar fuera a nadie vamos a detenernos en el de licor hierbas así, en general.
Los licores de hierba se han institucionalizado en todo el mundo como aperitivos perfectos para abrir el apetito o cerrar una noche. En Galicia se acostumbra degustar infinidad de ellos, varios de los cuales puedes pedir en bares, solicitar a quien te aloja y hasta preparar en casa.